Perú, un gran viaje de aventura
Cuando aterricé en Perú, de manera inconsciente, llevaba encima algo de todos esos miedos que, de alguna manera, me trataba de inculcar mucha gente que, sin conocer el país, se sentían con la libertad de opinar sobre él al enterarse de mis intenciones de viaje de aventura.
Nada más llegar al aeropuerto, comenzó a invadirme la ilusión, la adrenalina de conocer un lugar nuevo, y olvidé rápidamente esas sensaciones de temor. El ritual que nos escupió del aeropuerto fue similar al de otros lugares: recoger el equipaje, pasar la aduana, buscar un sitio donde cambiar un poco de dinero para llegar al centro, pillar un taxi y, en este caso, regatear un buen precio.
Ya en el centro de Lima, mi primera sensación hacia las personas que me rodeaban fue de familiaridad. Casi parecía estar en Madrid, el acento no me era tan desconocido, después de haber vivido en Madrid…
Durante el viaje fui reconociendo algunas peculiaridades de las personas que habitan cada región… O al menos, fue así como yo lo percibí: Las personas limeñas son diferentes al resto de habitantes del Perú. Mucho más urbanos, claramente, y bastante más occidentalizados/as. En la costa y la montaña también sentí grandes diferencias, siendo mucho más extrovertidos en la zona costera, mientras que la gente andina resultaba más tímida, aunque nunca menos amable y accesible.
Viajar en grupos reducidos o solo por Perú, te permite acercarte más a la gente del lugar, disfrutar de las pequeñas cosas, apreciar las particularidades de cada destino desde otra perspectiva. La idea generalizada de un país o región se transforma a micro sensaciones, convirtiéndose en un verdadero viaje de aventura, de descubrimiento.
Este recorrido nos llevará a descubrir el carácter de las personas que habitan un lugar caracterizado por lo agreste de las montañas, los contrastes en la naturaleza, en el color de las ropas que visten sus gentes, en las tonalidades de su piel o en las variedades de esa fauna que les rodean. Pese tanta diversidad, nos encontraremos con una homogeneidad de personas sencillas, dispuestas a ayudar, con buenas intenciones y que, por encima de todo, no buscan engañar.
En Perú, viajando en grupos reducidos, que es la esencia de nuestros viajes de aventura en 3000Km, buscaremos las sensaciones más auténticas en este país andino, nos encontraremos gente orgullosa de su pasado Inca y cuya herencia tratan de reivindicar y poner en valor de cara al visitante.
Realmente sentiréis que tenemos muchas cosas en común con los peruanos: disfrutan y se quejan de lo mismo, aprecian gestos parecidos, sienten de manera intensa, tienen aspiraciones paralelas a las nuestras, incluso entienden la vida de un modo muy similar. No en vano hace cinco siglos nuestra sangre y cultura se mezcló…
Olaya dice:
Hola quería consultar para hacer un viaje a Peru con multiaventura para mí y mi pareja. Sobre todo quería saber si se hacen actividades como bici, escalada, canoa o similares, seguros y precios. Mil gracias. Olaya