Fotografías y miradas del viaje
Quizás mirar y ser observado sean dos acciones que parecen obvias pero, para que en las miradas que se cruzan entre dos seres haya algún tipo de intercambio real, necesitamos aprender a inhibir los prejuicios que podamos sentir en ese instante y mostrarnos sinceros con nosotros mismos y con quien tenemos enfrente.
A través de mis viajes por Asia, he ido conociendo poco a poco algunas enseñanzas del budismo y he aprendido la importancia de las miradas. He descubierto la oportunidad que supone mirar a los ojos del otro de manera sincera, desnudando tu esencia desde el primer momento y regalando espontaneidad.
Para mí la fotografía funciona exactamente igual que una mirada: Siempre fui un apasionado de la fotografía de viajes, en las mías buscaba autenticidad y veracidad, pero siempre evité dejarme fotografíar. Quizás porque me daba miedo que otro descubriera mis imperfecciones.
Cuando viajo, siempre me persigue la idea de cómo hacer una fotografía, con la gente que voy encontrando en el camino, para que consiga transmitir esa franqueza que busco. Creo que no es cuestión únicamente de colocarme en una posición adecuada y darle al disparador, pienso que a veces los viajeros pecamos de no dedicar el tiempo necesario a cada foto; no nos paramos un instante a generar esa complicidad de miradas. Nos es más fácil robar que pedir permiso.
Mi objetivo es, pues, saber aplicar mi aprendizaje sobre la importancia de las miradas en cada fotografía que realice. En el próximo viaje voy a tratar de buscar la veracidad en cada mirada, en cada fotografía. Trataré de ser un buen anfitrión en la mirada del otro. Intentaré robar menos y regalar más.
Esta entrada en el blog pretende ser, únicamente, una declaración de intenciones pública, otro paso en este viaje de 3000km, una reflexión sobre mi forma de fotografiar. Nunca una crítica a cualquier ningún otro tipo de fotografía.
malurojasfalcone dice:
Hola! yo acabo de volver de la India, y tienes toda la razón…las miradas son las más intensas que he sentido… y no se cortan en mirarte de arriba abajo! Yo desde luego, me sentí al principio incómoda pero luego comprendí con los indios son curiosos y miran por mera curiosidad!! Yo tenía que robar algunas fotos por la calle, pero otras las pedía!!! realmente unas fotos preciosas las tuyas!!! Un saludo!!
Anton dice:
Buenas Malú
Si, si que son curiosos los indios, a parte de indiscretos (esto ultimo menos que los chinos), pero son buena gente por lo general. Es divertido jugar al juego de lo indiscreto lo curioso, y sorprenderles a ellos, pero por lo normal no se molestan.
Este 10 de Octubre vuelvo a India, ya te contaré que tal.
Animo con el contendio de tu web maluviajes.wordpress.com
Por cierto me gusta mucho tu tu país ;-)
Mario dice:
Cada una de esas miradas cuenta una historia. Impresionantes.
Anton dice:
Pues la verdad que si Mario, tienes mucha razón, se podría contar muchas cosas de todas las miradas.
arantxavr dice:
que miradas tan preciosas e intensas. Incluso la que vemos los ojos se precibe..
Eva dice:
Antón, tu ya eres un buen anfitrion de la mirada del otro, sólo tienes que dejarlo salir.
Anton dice:
Prometo esforzarme en dejarme llevar, en este próximo viaje ;-)
Anton dice:
Los indios son gente con mirada muy directa y muy intensa, es gente que se permite fotografiar con facilidad, no tienen ningún miedo.