Los desiertos representan aproximadamente un tercio de la superficie terrestre del planeta. Por definición, un desierto es una región que recibe alrededor de 250 milímetros de lluvia o menos cada año. Espacios donde la vida humana se convierte en una hazaña, cuando no un imposible, y donde la naturaleza se presenta en su estado más primitivo y virgen. Viajeros de todos los tiempos han temidos las travesías por estas grandes extensiones de arena, piedra o tierra agrietada donde el agua brilla por su ausencia. Os presentamos algunos de los desiertos que más inspiran viajes alternativos y diferentes.

Wadi Rum, Jordania

Los cañones cincelados, las rocas y dunas de arena, del también conocido como el Valle de la Luna, han sido el escenario de muchas películas. La más recordada es la mítica Lawrence de Arabia, otras más recientes The Martian, película de ciencia ficción dirigida por Ridley Scott y protagonizada por Matt Damon. Merece una visita por los impresionantes paisajes, además de vivir una experiencia única durmiendo en un campamento del desierto y ver las estrellas desde uno de los mejores puntos del mundo mientras se escucha la música de los beduinos. Recorre el Wadi Rum en nuestro viaje por Jordania.

Sáhara, Marruecos

El desierto caliente más grande del mundo, se extiende por 3.5 millones de kilómetros cuadrados y cruza 11 países en el norte de África. Marruecos, el Sáhara Occidental, Mauritania, Argelia, Túnez, Mali, Niger, Libia, Chad y Egipto son los países a los que el “desierto de desiertos” domina en mayor o menor medida. El Sáhara, es el tercer desierto más grande del mundo. Los vientos y las lluvias esporádicas han dado forma al Sáhara a un paisaje de dunas, valles, llanuras y mares de arena. El silencio del desierto sobrecoge. Visita el Sáhara en nuestro viaje por Marruecos.

Gobi, Mongolia

El desierto de Gobi, que en lengua mongol significa “lugar sin agua”, es el desierto más grande de Asia, el quinto más grande del mundo, atraviesa dos países, China y Mongolia. Hay pocos lugares en el planeta donde todavía es posible desconectar de medios de comunicación, redes sociales,…como se puede hacer en el Gobi. Las dunas de arena colosales, los cañones llenos de hielo, los fósiles de dinosaurios y las caminatas en camello garantizan un viaje de aventura. La localidad de Jiayuguan, situada cerca de la Gran Muralla, es uno de los puntos de accesos para los escasos viajeros que osan visitar este páramo.

Desierto Blanco y el desierto Negro, Egipto

Muy cerca uno del otro, son dos desiertos totalmente contrastados. El desierto Blanco es una maravilla geológica con surrealistas formaciones blancas de roca caliza deformadas por los vientos del desierto. Y el desierto Negro, parece un paisaje salido del Hades, cubierto con una capa de polvo y piedras de color negro. Descúbrelo en nuestro viaje por Egipto.

Desierto de Namibia

Se extiende a lo largo del litoral de Namibia y tiene paisajes de belleza deslumbrante con colosales dunas y una costa llena de esqueletos de barcos embarrancados. Namibia también tiene otro desierto, el desierto del Kalahari, hogar de los bosquimanos desde hace 30.000 años.

Desierto de Thar, India

La ciudad de Jaisalmer es el punto habitado más remoto de la Rajastán, el estado indio de los maharajás. Situada en medio de la soledad absoluta del desierto de Thar, la ciudad conserva su casco antiguo rodeada por noventa y nueve baluartes. Una de las formas más novelescas de llegar Jaisalmer es cruzando el desierto en el legendario tren que atraviesa la región. El desierto de Thar, que cubre 77.000 millas cuadradas, forma una frontera geomórfica entre la India y Pakistán. Además, el Thar es la zona árida más poblada del mundo, cubierta en su mayoría por la vegetación de matorrales, con abundantes aldeas ganándose la vida de sus animales y manteniendo una cultura desértica ricamente colorida. Descúbrelo en nuestro viaje por India.

Atacama, Chile

Ubicado en el altiplano de la cordillera de los Andes, al norte de Chile, el desierto de Atacama es el lugar más seco del planeta. Sólo los indios aimaras han sido capaces de adaptarse a sus duras condiciones. Atacama es un mundo lleno de sorpresas geológicas, con montañas decoradas de geoglifos, géiseres y fumarolas que expulsan el calor del magma terrestre; y también oasis alrededor de los cuales ha sobrevivido la cultura aimara. Pocos lugares ofrecen un mejor marco para la tranquilidad, la reflexión y el sosiego.

Dasht-e-Kavir, Irán

Ubicado en el centro de Irán, la rareza de su topografía es el producto de uno de los climas más extremos en la Tierra. La vista desde el aire es surrealista, parece una pintura al óleo. Y no es para menos ya que Dasht-e Kavir es uno de los territorios más secos del mundo al no recibir lluvias durante la mayor parte del año. Junto al desierto de Dasht-e-Lut, ocupa el centro de Irán, rodeados de ciudades como Yazd, Mashad, Kermán o la monumental Isfahán.  Descúbrelo en nuestro viaje por Irán.

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